Las sierras han acompañado al ser humano desde tiempos antiguos. Su evolución ha estado marcada por las necesidades de construcción, carpintería, metalurgia y bricolaje doméstico. Hoy existe una gran variedad de modelos que responden a diferentes exigencias. Desde las más tradicionales, que dependen de la fuerza manual, hasta las versiones eléctricas y de precisión, cada una cumple un papel concreto y permite optimizar el trabajo. Conocer las diferencias entre ellas es clave para elegir la herramienta más adecuada en función del material y del tipo de corte que se requiere.
Sierras manuales
Las sierras manuales son las más antiguas y todavía mantienen un lugar privilegiado en los talleres y hogares. Funcionan sin electricidad, lo que las convierte en aliadas en situaciones donde se necesita independencia y control.
Serrucho universal
El serrucho universal es la herramienta más popular dentro de esta categoría. Su hoja dentada permite cortar tablas de madera de diferentes grosores. Con cambios de hoja puede adaptarse al corte de plásticos o incluso metales blandos. Es básico en carpintería doméstica y se caracteriza por su versatilidad.
Sierra de costilla
Esta variante incorpora un refuerzo en la parte superior de la hoja. Esa rigidez extra evita que se doble durante el trabajo y facilita cortes rectos muy finos. Es muy utilizada en tareas de ensamblaje de muebles y carpintería de precisión.
Segueta o sierra de marquetería
Se distingue por su hoja delgada y muy fina, pensada para recortes delicados y formas curvas. Los artesanos la emplean en marquetería, fabricación de figuras o en el diseño de piezas ornamentales. Su estructura ligera permite movimientos ágiles y detallados.
Sierra de arco
Cuenta con un marco metálico en forma de arco que sostiene la hoja. Se usa tanto en madera como en metal, dependiendo del tipo de hoja instalada. Su diseño soporta tensiones altas, lo que la convierte en una herramienta duradera para cortes más exigentes.
Sierras eléctricas portátiles
Con la llegada de la electricidad se multiplicaron las posibilidades de corte. Las sierras eléctricas portátiles ofrecen potencia y rapidez, lo que reduce el esfuerzo físico y aumenta la precisión.
Sierra circular
Es una de las más conocidas dentro de esta familia. Su hoja circular gira a gran velocidad y permite cortes rectos muy definidos en madera, tableros, plásticos y, con discos específicos, también en metal. Su capacidad para trabajar en diferentes materiales la ha convertido en una herramienta imprescindible en talleres y obras. Un ejemplo destacado es la sierra de incisión Festool TS 55, reconocida por su fiabilidad y precisión en cortes limpios. Podemos ver sus características en https://jucarsa.es/es/sierras-circulares/5702-festool-sierra-de-incision-ts-55-febq-plus-fs.html.
Sierra de calar
La hoja se mueve de manera vertical, arriba y abajo, lo que la hace perfecta para cortes curvos. Es muy práctica en bricolaje, pues permite realizar desde cortes rectos hasta formas personalizadas en madera, aglomerados o incluso aluminio. Su facilidad de manejo la convierte en una de las favoritas para usuarios domésticos.
Ingletadora
Diseñada para cortes en ángulo, es la herramienta estrella en la instalación de molduras, marcos y estructuras que requieren uniones en ángulo recto o a 45 grados. Su brazo articulado y la guía graduada aseguran exactitud en cada corte.
Sierra de sable
Su hoja alargada se desplaza hacia adelante y hacia atrás. Funciona muy bien en tareas de demolición, ya que permite cortar rápidamente vigas, tubos y perfiles metálicos. Por su tamaño compacto se maneja con facilidad en zonas de difícil acceso.
Sierras estacionarias
Son máquinas de mayor tamaño que se instalan en talleres. Ofrecen potencia constante y son ideales para trabajos intensivos y repetitivos. Requieren espacio, pero garantizan acabados profesionales.
Sierra de mesa
Se compone de una hoja circular montada en una superficie plana. Permite deslizar la pieza para realizar cortes rectos y paralelos. Es imprescindible en la fabricación de muebles y en la producción en serie de piezas de madera.
Sierra de cinta
Su hoja es una banda metálica cerrada que se mueve de manera continua sobre dos ruedas. Gracias a esta estructura, puede cortar piezas gruesas y realizar cortes curvos suaves. Se utiliza en carpintería industrial, ebanistería y también en carnicería para cortar huesos.
Sierra radial
Comparte características con la sierra circular, pero se diferencia en que la hoja puede desplazarse sobre un brazo. Esto le da gran precisión y versatilidad, ya que permite realizar cortes largos y muy exactos en tableros anchos.
Sierras especializadas
En algunos casos, se requieren herramientas diseñadas específicamente para un tipo de material o un corte muy particular. Aquí entran las sierras especializadas.
Sierra de diamante
Equipada con un disco recubierto de polvo de diamante, se utiliza en construcción para cortar materiales duros como mármol, granito o azulejos. Su resistencia la hace insustituible en trabajos de albañilería.
Sierra para metal
Con hojas dentadas fabricadas en acero de alta resistencia, estas sierras están destinadas a cortar perfiles y tubos metálicos. Se utilizan en talleres mecánicos y en construcción metálica.
Sierra de calar de marquetería
Es una versión más refinada de la caladora. Se emplea en trabajos que exigen cortes minuciosos en maderas finas y materiales delicados. Es habitual en talleres artísticos y de manualidades.
Sierra de poda
Pensada para el trabajo en jardinería, su hoja está diseñada para cortar ramas verdes o secas con rapidez. Existen modelos manuales y eléctricos, siendo estos últimos muy útiles para podas frecuentes.
¿Qué tener en cuenta al elegir una sierra?
Al momento de elegir una sierra es importante considerar varios factores, ya que no se trata únicamente de la fuerza de la máquina, sino de qué tan bien se adapta a la tarea que deseas realizar.
El material que vayas a cortar es clave: la madera, el plástico, el metal o la piedra requieren hojas y mecanismos distintos para obtener un buen resultado. También influye el tipo de corte, pues no es lo mismo buscar trazos curvos, rectos o en ángulo, ya que cada modelo responde de manera diferente.
Otro aspecto relevante es el espacio disponible. Las versiones manuales o portátiles son prácticas en lugares pequeños, mientras que las de banco exigen un área de trabajo fija. La seguridad nunca debe dejarse de lado: gafas, guantes y fijaciones son imprescindibles.
