Diferencias entre estufas catalíticas y estufas de llama azul

Al acercarse el invierno, es necesario pensar en un sistema de calefacción que sea eficiente y económico. Uno de los más usados son las estufas de gas, debido a que no consumen electricidad y se pueden llevar de una estancia a otra con facilidad.

Hay distintas estufas que funcionan con gas, siendo más populares las catalíticas y de llama azul, debido a su capacidad de generar calor. Las catalíticas tienen la ventaja de mantener la habitación caldeada luego de apagarse, mientras que las de llama azul calientan muy rápido el espacio donde se encuentran.

Al momento de seleccionar la estufa que más te conviene, debes tomar en cuenta desde la seguridad, el tamaño de la habitación o el consumo del equipo. Por esto, te traigo esta revisión con las características y diferencias más relevantes entre las estufas catalíticas y las de llama azul.

Pros y contras de las estufas catalíticas

Estas estufas funcionan con gas, pero el calor es producido por el calentamiento de los paneles del equipo. Para esto, tienen una placa interna que funciona como catalizador de la reacción química del butano, que produce la energía necesaria para calentar los paneles.

Pros de las estufas catalíticas

  • No producen llama directa, por lo que se consideran bastante seguras en ambientes donde hay niños y mascotas.
  • El calor se mantiene en los paneles por un tiempo luego de haber apagado la estufa.
  • Muchos modelos incorporan un termostato para regular la temperatura.
  • Incluyen filtros de seguridad para detectar altos niveles de CO₂.
  • Puede ser trasladada de una habitación a otra, ya que su estructura incorpora ruedas en la parte inferior.
  • Son bastante económicas.

Contras de las estufas catalíticas

  • Toman un tiempo en calentar la habitación, debido a que se debe producir la reacción interna para que se calienten los paneles.
  • El calor se transmite por radiación, por lo que calientan más a los objetos cercanos, con una distribución poco uniforme.
  • Consumen oxígeno y liberan CO₂ al ambiente, por lo que se debe tener cuidado de ventilar la habitación donde se utilizan.
  • Son eficientes, particularmente en habitaciones pequeñas, entre 20 a 25 m², ya que en espacios más grandes tienen mayor dificultad para calentar.
  • Suelen ser de gran tamaño, por lo que ocupan un espacio importante en la habitación.
  • El panel catalítico se va dañando con el uso, siendo recomendable hacer un buen mantenimiento para alargar su vida útil.

Pros y contras de las estufas de llama azul

Este tipo de estufa a gas, produce una llama cuando se quema el gas usado como combustible, que es generalmente butano o propano. Estas estufas alcanzan altas temperaturas rápidamente y funcionan por convección.

Pros de las estufas de llama azul

  • Son ideales para ambientes donde hay corrientes de aire y humedad, debido a que van calentando el aire de la estancia.
  • Suelen ofrecer una calefacción muy equilibrada en la estancia, ya que tienen salida de calor por la parte frontal y superior.
  • Calientan rápidamente la habitación una vez que las enciendes.
  • Tienen mayor potencia que otras estufas de gas, por lo que se recomiendan para habitaciones grandes, a partir de 35 m².
  • Al producirse el encendido de la llama no generan CO₂.
  • Funcionan tanto con gas butano, propano o mixto, según tus preferencias.
  • La mayoría de los modelos incorpora un sistema de encendido automático y distintos sistemas de seguridad.
  • Su consumo de combustible es relativamente bajo y es posible reducirlo hasta un 30% al seleccionar un modelo con termostato.
  • El quemador es muy duradero y suele tener una mayor vida útil que otras estufas a gas, siempre que se haga el mantenimiento adecuado.

Contras de las estufas de llama azul

  • No mantienen calor residual luego de apagar el equipo.
  • Al producir una llama directa, es más probable que puedan ocurrir accidentes al acercarse el equipo. Por esto, debes tener más cuidado si hay niños o mascotas en la habitación.
  • Se debe controlar siempre que la llama se mantenga de color azul, a fin de que mantenga su eficiencia.
  • Suelen ser un poco más costosas que otras estufas a gas.

Diferencias entre estufas catalíticas y estufas de llama azul

Si estás buscando una estufa a gas para usar en tu hogar, es importante que compares las más usadas. Las estufas de llama azul y las catalíticas están entre las más buscadas, pero tienen diferencias importantes que debes evaluar antes de tomar una decisión:

Funcionamiento

Aunque ambas estufas usan como combustible el gas, lo hacen de manera diferente, ya que las catalíticas no producen llama directa. Por su parte, las de llama azul incorporan un quemador que enciende una llama, la cual se calienta con mucha rapidez.

Una estufa catalítica produce calor residual al apagarla, mientras que una de llama azul deja de generarlo una vez que se apaga.

En las catalíticas el calor pasa a los paneles incorporados, por lo que el calentamiento de la habitación es gradual. Al encender una estufa de llama azul, el aire se va a calentar en poco tiempo, llegando a la temperatura deseada en pocos minutos.

Consumo

Las estufas de llama azul tienen un mayor consumo promedio que las catalíticas, por lo que el rendimiento del gas será menos. Se estima que una estufa catalítica consume unos 200 gr/hora de gas, mientras que en una de llama azul aumenta hasta 300 gr/hora.

Además, toma en cuenta que con la estufa de llama azul el calor que se percibe en la habitación es casi instantáneo. Por su parte, una catalítica tiene la ventaja de mantener el calor en los paneles luego de apagado, lo cual también se refleja en un mejor aprovechamiento del combustible.

Potencia

Una estufa catalítica suele tener una potencia baja, por lo que son mejores para habitaciones más pequeñas. En general, se encuentran entre los 2.500 a 3.000 vatios, lo cual se considera suficiente para una estancia entre los 20 a 25 m².

Las estufas de llama azul necesitan una mayor potencia para lograr las altas temperaturas al quemar el gas. Suelen desarrollar valores de 4.000 a 4.200 vatios, por lo que son adecuadas para la calefacción de habitaciones de hasta 45 m².

Sistemas de seguridad

Hay personas que prefieren no usar las estufas a gas, debido a que sienten temor por la producción de gases nocivos. No obstante, los fabricantes hay integrado diversos sistemas de seguridad para evitar accidentes, así como instrucciones precisas sobre su uso.

Las estufas catalíticas no producen llama, pero pueden generar CO₂, por lo que se debe tener cuidado con la ventilación y revisar que tengan sensores de detección de gases. Por su parte, las de llama azul suelen incorporar sistemas piezoeléctricos para un encendido seguro, no producen CO₂, pero hay que evitar acercarse al equipo por la presencia de la llama.

Precio

Las estufas a gas suelen ser mucho más económicas a largo plazo que otros tipos de sistemas de calefacción, aunque hay diferencias entre ambas. Las catalíticas tienden a tener precios bajos, con rangos entre los 50 a 150 euros, dependiendo de la potencia y prestaciones.

Por su parte, las de llama azul son un poco más costosas, a partir de 65 euros hasta 300 los modelos más modernos. La ventaja de estos equipos es que son mucho más duraderos y con mantenimiento muy sencillo.

¿Qué necesitas, una estufa de gas catalítica o de llama azul?

Para decidirte por la mejor opción para tu hogar, debes tomar en cuenta algunas características de ambos tipos de estufas:

  • Tamaño de la habitación: este tipo de estufas no son adecuadas para espacios muy pequeños, ya que requieren una buena ventilación. Para estancias medianas es mejor una estufa catalítica, mientras que una de llama azul funciona mejor en habitaciones grandes.
  • Rapidez de calefacción: si requieres un sistema que caliente rápido la habitación, debes optar por una estufa de llama azul. En caso de que puedas esperar para que la estancia se caldee, la catalítica tiene la ventaja de seguir reteniendo el calor un rato luego de apagada.
  • Características ambientales: en habitaciones muy húmedas o con corrientes de aire, funcionará mejor una estufa de llama azul. Las estufas catalíticas concentran mejor el calor en espacios más estables.
  • Seguridad: cuando viven niños en casa o tienes mascotas, la catalítica se considera más adecuada, ya que no produce una llama. Por su parte, la estufa de llama azul no genera gran cantidad de gases potencialmente tóxicos.
  • Diseño: como ambos tipos de estufa deben tener espacio para colocar la bombona de gas, suelen ser grandes. Sin embargo, las de llama azul suelen tener un diseño más moderno, que se adapta mejor a la decoración de la habitación.
  • Durabilidad: en general, las estufas de llama azul tienen una vida útil más larga, debido a su estructura más sencilla y facilidad de mantenimiento. En las catalíticas, los paneles se van desgastando con el uso, por lo que duran un poco menos.