Tipos de lactancia

En este artículo revisamos los diferentes tipos de lactancia materna que existen. Sigue leyendo para conocer los distintos tipos de lactancia existentes y los diferentes tipos de leche materna que existen de la mano de las mejores especialistas en embarazos y lactancia materna. Si estás embarazada o acabas de dar a luz este artículo te interesa para poder valorar los diferentes tipos de lactancia y de leche materna que existen.

Tipos de lactancia

Por norma general podemos distinguir entre los distintos tipos de lactancia que presentamos a continuación.

1. La lactancia exclusiva

En primer lugar encontramos la lactancia exclusiva. Se trata de uno de los tipos de lactancia materna que existen y que como su propio nombre indica consiste en alimentar al bebé únicamente con la leche de la madre. Según la Organización Mundial de la Salud es recomendable alimentar a los bebés en exclusiva con su leche hasta los seis meses. Más adelante se recomienda introducir otro tipo de alimentos en la dieta de los niños. También es importante valorar, tal y como nos han explicado los expertos de clinica parc central, que la lactancia materna debe comenzar durante la primera hora de vida del niño y que se debe alimentar al bebé a demanda, sin recurrir al uso de chupetes, tetinas o biberones.

2. La lactancia predominante

Por otro lado encontramos la lactancia predominante. Se trata de un tipo de lactancia en el que se combina la lactancia materna con algunas dosis de leche de fórmula. Con este tipo de lactancia los niños pueden inferir también zumos, agua y otro tipo de bebidas de rehidratación oral aconsejadas para los bebés.

Es un paso intermedio entre la lactancia exclusiva y la complementaria, en la que se mantiene la leche materna pero se va introduciendo alimentos semisólidos y sólidos y también leche de fórmula. Lo mejor es empezar con agua y con zumos para después empezar ya con la lactancia complementaria.

3. Lactancia materna complementaria

Por otro lado, la lactancia materna complementaria. En este caso se combinan la leche materna, las papillas y los alimentos semisólidos. En las lactancias complementarias para bebés se introducen alimentos que cuenten con un alto valor nutritivo y que resulten sencillos de masticar y de digerir.

Es aquella que se realiza entre los seis meses y los dos años de vida, cuando el pequeño ya puede empezar a comer alimentos pero al mismo tiempo la leche materna sigue siendo una parte importante de su dieta.

4. La lactancia parcial

Por otro lado, si los bebés tienen pocos meses de vida y no se alimentan de manera exclusiva con leche materna, normalmente la lactancia materna en estos casos se combina con leche de fórmula. Conforme se va creciendo se van incluyendo otros alimentos en la dieta. También existe la alternativa de alimentar a los pequeños completamente a base de leche de fórmula. Esto puede ser desde por decisión personal hasta por la imposibilidad de alimentar al bebé con la lactancia materna, tanto por problemas de tiempo como por complicaciones a nivel médico.

5. La lactancia por biberón

Del mismo modo, la lactancia por biberón es un tipo de lactancia en la que el bebé se alimenta de leche, ya sea materna o artificial, mediante un recipiente transparente y cilíndrico con una tetina ubicada en su extremo, lo cual simula el amamantamiento. La decisión de si dar el pecho o utilizar biberón es realmente personal y ambas opciones tienen sus ventajas y sus desventajas.

6. La lactancia materna completa

Se trata de la lactancia que tiene lugar al combinar la lactancia exclusiva durante seis meses y la lactancia complementaria durante 18 meses. Es el período de lactancia completo el cual, según la OMS, debería durar por norma general hasta los dos años de vida.

7. Lactancia múltiple

Encontramos también la lactancia múltiple cuando una madre alimenta a dos o más hijos de la misma edad al mismo tiempo. Es una forma de lactancia que siguen las madres de gemelos o trillizos. En estos casos se debe tener cuidado de la madre porque el desgaste a nivel físico y mental suele ser grande si se tiene que amamantar a varios hijos.

8. Lactancia en tándem

Por otro lado, la lactancia en tándem se da cuando una madre debe alimentar a dos o más hijos de diferentes edades. Es algo menos común ya que no suele ser habitual dar a luz dos veces con menos de dos años de diferencia, que es lo que suele durar la lactancia. Ahora bien, también hablamos de lactancia en tándem cuando una mujer embarazada amamanta a otro hijo.

9. Lactancia mixta

Este tipo de lactancia combina la lactancia con leche humana y la no humana (la leche puede provenir de otros animales o contar con un origen artificial). Este nombre se usa también para referenciar a la forma de lactancia que combina dar el pecho con tomar biberón elaborado con leche artificial. Además, también puede ser sinónimo de lactancia complementaria.

10. Relactancia

Se trata de la situación en la que una madre, tras pasar por un período de suspensión de la lactancia o de introducción de la lactancia predominante o exclusiva decide regresar a la lactancia materna exclusiva, por el motivo que sea. Es decir, este concepto hace referencia a volver a la lactancia exclusiva después de abandonarla.

11. Lactancia diferida

La lactancia diferida es un tipo de lactancia materna en la que el bebé se alimenta de la leche de la madre de una forma diferente y no mediante el proceso de amamantamiento. En estos casos la mujer extrae la leche de su pecho para que el bebé pueda ingerirla mediante un biberón.

12. Lactancia directa

La lactancia directa, en cambio, es aquella lactancia materna en la que el bebé se alimenta predominantemente del pecho de la madre de forma directa. Se trata de la forma de lactancia que se vincula al amamantamiento o al proceso de dar el pecho.

Tipos de leche materna

A continuación pasamos a conocer los diferentes tipos de leche materna que existen. Sigue leyendo para conocer los diferentes tipos de leche materna que existen.

1. La leche de prétermino

Se trata de un tipo de leche que producen las mujeres que han tenido un parto prematuro. Las madres que han dado a luz antes de tiempo producen este tipo de leche materna durante períodos prolongados. Esta leche cuenta con una gran cantidad de proteína y una menor cantidad de lactosa que la leche madura, con lo que cuenta con la combinación más adecuada, ya que los niños inmaduros requieren una mayor cantidad de proteína.

2. El Calostro

Se trata de un líquido de color amarillo muy rico en vitaminas liposolubles, en vitaminas y en minerales que es el precursor de la leche materna. El calostro se secreta por la glándula mamaria durante los últimos meses de embarazo y los cuatro días que siguen al parto.

Proporciona al bebé todo lo que necesita y actúa como un laxante suave, preparando el sistema digestivo del bebé para que pueda recibir la leche materna o también proporcionándole anticuerpos de la madre que lo protegerán contra diferentes enfermedades.

3. La leche de transición

La leche de transición es la que producen las mujeres entre el quinto y el décimo día después del parto. Esta leche tiene más grasa, más lactosa y más vitaminas hidrosolubles que el calostro, con lo que suministra más calorías a los recién nacidos y se adecúa a la perfección a sus necesidades conforme van pasando los días. Entre el cuarto y el sexto día aumenta la secreción de leche: es lo que se denomina la subida de la leche. Se trata de una leche de composición intermedia que irá variando hasta que alcance la composición de la leche madura.

4. La leche materna madura

Finalmente encontramos la leche materna madura, el tipo de leche materna más conocida que secretan las glándulas mamarias a partir del décimo día tras el parto. Esta leche materna aporta a los bebés todas las calorías y sustancias nutritivas que necesitan para su normal crecimiento y desarrollo durante los primeros seis meses de vida y se recomiendan continuar con ella hasta los dos años de vida, siempre complementándola con la alimentación complementaria.

Entre los principales componentes de la leche encontramos el agua, las proteínas, los hidratos de carbono, la grasa saludable, los minerales y las vitaminas. Además cuenta con elementos de traza y con oligoelementos, con enzimas y con hormonas.

La leche materna protege de forma activa el organismo del bebé y además es inmunomoduladora, con lo que estimula el desarrollo del sistema inmune de los bebés. Cuenta también con diferentes componentes antiinflamatorios y anti infecciosos.

Por otro lado, la leche materna también cuenta con una gran complejidad a nivel biológico y es el mejor alimento para los bebés, así como cumple con funciones emocionales y de vínculo muy importantes.