Poco a poco el número de tipos de tejidos textiles sigue en aumento. En este artículo vamos a hablar de los más importantes, con el objetivo de tener claro cuál es el tejido que mejor se adapta a nuestras necesidades. Hay que tener en cuenta que no es lo mismo comprar un tejido para la prenda de un adulto que comprarla para la prenda de un bebé.
Tipos de tejidos naturales
Lana
Este tejido natural proviene directamente de las ovejas. Dentro de este rango podemos distinguir diferentes tipos de lana, dependiendo del tipo de oveja del cual provenga la lana. La lana destaca por una gran absorción de la humedad y sobre todo por ofrecer una gran elasticidad.
Pelos
Es otra variedad de tejido que se puede obtener de diferentes animales. Su principal propiedad es la de ofrecer una buena protección térmica, gracias a que es un tipo de tejido que ofrece fibras huecas. Como hemos comentado, este tejido natural se puede obtener de animales como los caballos, conejos, vacas, cabras… cada variedad de pelo tiene sus pros y sus contras.
Seda
Es un tejido muy valorado por sus características y por lo costoso que es conseguirlo. La seda proviene directamente de los gusanos de seda. Este tipo de tejido destaca por ofrecer una gran elasticidad, resistencia y suavidad. Normalmente su precio es elevado, por lo que se suele usar en prendas de alta calidad.
Tipos de tejidos sintéticos
Este tipo de fibra sintética destaca por ser obtenida únicamente de manera artificial. Para conseguirlo, normalmente se suele apostar por los derivados del petróleo para obtener estos tipos de tejidos. Todo el proceso del tejido es totalmente artificial, es decir, la materia prima como los propios filamentos. Hay que tener en cuenta que este tipo de tejidos destacan por ser mucho más económicos que los naturales. A esto hay que añadir que normalmente este tipo de tejidos se usan principalmente para conseguir hacer prendas que duren y ofrezcan una gran resistencia. Aunque en ocasiones se hacen de manera sencilla para que la durabilidad sea la justa y en consecuencia el tejido tenga que ser renovado cada poco tiempo, fomentando el capitalismo.
Tipos de tejidos artificiales
Este tipo de fibras se consiguen a través de las fibras naturales. La diferencia de las naturales puras es que este tipo de tejidos se someten a una manufactura que altera las fibras. Esto se traduce en que los filamentos son más largos y resistentes. Esta variedad de tejidos las podemos dividir en los siguientes tipos.
Tejidos algínicos
Esta variedad de tejido también se le conoce bajo el nombre de rayón alginato. Para poder obtener el tejido, el alginato de sodio tiene una gran presencia en su elaboración.
Tejidos proteínicos
Hablamos de fibras que provienen directamente de la regeneración de proteínas. Estas proteínas se obtienen principalmente de las plantas, aunque es verdad que hay excepciones y en ocasiones se obtienen de los animales.
Tejidos celulósicos
Es una variedad de tejido que deriva de la industria de la celulosa. Hasta hace poco este tipo de tejido se le conocía bajo el nombre de seda artificial, luego pasó a llamarse rayón y actualmente recibe este nombre. Destaca por tener unos precios económicos de producción, de aquí que sea una variedad de tejido que cada vez esté más presente en nuestro día a día.
Tipos de tejido textil según la técnica usada
Ahora te vamos a hablar de los tipos de tejidos y sus funciones según la técnica empleada a la hora de elaborarlos, sin tener en cuenta el material usado en su elaboración.
Tejido liso
Esta variedad de tejido también se conoce en el mundo de la moda bajo el nombre de tafetán. Se puede decir que estamos ante el tejido más básico y sencillo del mercado. Los hilos de la trama y de la urdimbre se entrelazan para dar realidad a este tipo de tejido. Dentro de este rango podemos distinguir telas muy conocidas como el crespón, estopilla, muselina, percal, tul, escocés o acanalado entre otros muchos.
Tejido cruzado
Destaca por apostar por las líneas horizontales muy marcadas, las cuales dan elegancia al textil. Para conseguir elaborar este tipo de tejido, se apuesta por un entrelazado de do hilos de la urdimbre y otro de la trama. Algunos modelos pueden ser parejos y otros pueden apostar por las filas alternas. Gracias a esto, se pueden conseguir estilos diferentes. Algunos de los más conocidos son los tejidos de sarga, espiguilla, cheviot, surah, Denia, cutí, gabardina… y gracias a este entrelazado, se puede destacar que estamos hablando de unas telas muy resistentes. Muchas prendas de trabajo apuestan por esta variedad.
Tejido de Jacquard
Esta variedad de tejido se usa para crear telas de dibujos. En este caso apuesta por una combinación de tejidos lisos con Jacquard, lo que permite disfrutar de resultados muy interesantes. Por regla general, esta variedad apuesta principalmente por motivos repetidos y pequeños, los cuales solemos ver en vestidos o camisas. Algunos ejemplos son los brocados o el ojo de perdiz entre otros.
Tejido de satén
Se parece bastante al tejido cruzado, pero destaca por tener una textura mucho más densa y suave, lo que hace que sea una variedad con una demanda creciente. El único pero de este tejido lo encontramos en la resistencia, la cual es muy baja. Dentro de este tejido podemos encontrar muchos ejemplos, como por ejemplo la piel de ángel, damasco, raso o satín entre otros.