Tipos de dinosaurios

Estos prehistóricos reptiles que vivieron en la Tierra hace alrededor de 245 millones de años variaban de forma considerable en peso y tamaño. Algunos podían llegar a las 80 toneladas y los 30 metros de altura. Más o menos, como un edificio de unas seis plantas.

Son muchas las formas de separar los tipos de dinosaurios que existieron: en función de su tamaño y peso, de si eran voladores o no, de la época en la que vivieron, etcétera. A continuación, te mostraremos los distintos tipos de dinosaurios que se conocen en función del tipo de alimento que ingerían.

Carnívoros

Fueron los verdaderos depredadores de la Tierra, distinguiéndose entre cazadores y carroñeros. Los más conocidos dentro de este tipo de dinosaurios son:

Velociraptor

Pese a que su tamaño no era tan impresionante como el de otros depredadores, tenía otras cualidades que lo hacían igualmente temible. La más importante de ellas era la agilidad, ya que podían correr a gran velocidad e incluso dar saltos de varios metros de longitud. Además, los estudios han demostrado que tenían una vivaz inteligencia, capacidad que les permitía cazar en grupo con estrategias de ataque de lo más elaboradas.

Este tipo de dinosaurio era bípedo, con una cola larga y rígida y tres garras en sus patas que utilizaba para desgarrar a sus presas. Los huesos de sus patas eran muy similares a los de las aves que conocemos. Además, podía alcanzar los casi dos metros de altura y pesaba alrededor de 15 kg, lo que lo hacía muy ligero.

Tyrannosaurus Rex

El T-Rex es considerado el rey de los depredadores aunque, pese a la fama que películas como “Jurassic Park” le han dado, no era el dinosaurio más grande, y eso que podía superar los cuatro metros de altura y los 12 de longitud.

Una de las características más importante de este tipo de dinosaurio carnívoro es su mandíbula, cargada de poderosos músculos capaces de ejercer una fuerza de 3.000 kilogramos. Su cerebro doblaba en tamaño al de otros dinosaurios mayores, como el Albertosauros, lo que los dotaba de una inteligencia superior para la caza.

Dilophosaurus

Este tipo de dinosauros no se dedicaba a la caza ya que, por sus condiciones y aptitudes físicas, no tenían grandes capacidades para la misma. Por tal motivo, eran carroñeros, se alimentaban de cadáveres de animales muertos cazaban otros depredadores o de aquellos que morían por vejez o muerte súbita.

Sus dientes tenían forma de sierra pero su mandíbula, como su mordisco, era realmente débil, por lo que no era capaz de matar presas vivas. Su cadera también era muy débil, impidiéndole correr rápido, aunque la forma de sus patas ha revelado en algunos estudios que podía alcanzar hasta a 30 km/h, pero no de manera prolongada.

Herbívoros

Este tipo de dinosaurios se alimentaban exclusivamente de plantas y hierbas. Los más conocidos eran los siguientes.

Braquiosaurio

Es uno de los más representativos dentro de las especies herbívoras. Su nombre significa “brazo de lagarto” y medía alrededor de 26 metros de largo y 12 de alto, pesando entre las 32 y las 50 toneladas. Además, una de las características más conocidas de este dinosaurio era su cuello excepcionalmente largo, que le permitía llegar a las ramas más altas de los árboles, un detalle importante ya que debía ingerir unos 1.500 kg de comida al día para mantener su nivel de energía.

Stegosaurus

Medía alrededor de 9 metros de longitud y 4 de alto, con un peso que oscilaba las 6 toneladas. Para los niños, es uno de sus favoritos, en especial por las dos filas de placas óseas que se encontraban en su espina dorsal y que se alargaban por su cola, como arma defensiva contra depredadores, lo que le da su nombre que, literalmente, significa “lagarto con tejado”.

El Stegosaurus contaba con dos patas delanteras considerablemente más pequeñas que las traseras, lo que provocaba una menor estabilidad, haciendo que el cráneo quedase mucho más próximo al suelo que la cola. Tenía, además, una especie de pico que con pequeños dientes útiles para triturar y masticar las plantas.

Triceratops

Este dinosaurio de cabeza amartillada con tres poderosos cuernos fue la presa favorita del T-Rex.

Medían entre 7 y 10 metros de largo y podían superar los 4 metros de altura, con un peso de entre 5 y 10 toneladas. La característica más representativa de los Triceratops es su cráneo, considerado el de mayores dimensiones de todos los animales terrestres, extintos o no. De hecho, debido a sus dimensiones, suponía casi un tercio de la longitud del animal. También era fácilmente reconocible por tres cuernos, uno en el hocico y dos más grandes encima de cada ojo, que podían alcanzar un metro de tamaño.

Omnívoros

Este tipo de dinosaurios eran tanto carnívoros como herbívoros, teniendo la capacidad de elegir entre ambos tipos de alimentación y nutrirse de ellos. No obstante, una característica importante de la mayoría de los dinosaurios omnívoros es que tenían ciertos límites, es decir, al tener un tracto digestivo no muy especializado, no podían combinar ambas dietas en un mismo día.

Oviraptor

Las dimensiones del Oviraptor eran las de un dinosaurio de tamaño pequeño, con una altura de poco más de un metro y un peso de, aproximadamente, 50 kilogramos.

Este tipo de dinosaurio no contaba con grandes músculos y su fuera era más bien escasa, de forma que aprovechaba su gran velocidad, su agilidad y pequeño tamaño para pasar desapercibido por otros depredadores.

Una de las características más importantes del Oviraptor y que es, precisamente, la que le da su nombre, es el hecho de que este pequeño dinosaurio se dedicaba, en mayor parte, a robar los huevos de los nidos de otros dinosaurios para ingerirlos como parte de su dieta principal, pese a que también se alimentaba de plantas.

Mei

El nombre de este dinosaurio significa en chino “profundo sueño” y es apodado también como “el dinosaurio que dormía como las gallinas” ya que los restos que se han encontrado de este tipo de dinosaurio fueron en posición durmiente como una gallina.

Las dimensiones de estos dinosaurios eran verdaderamente pequeñas, llegando algunos a pesar tan solo un kilogramo, lo que hace que su parentesco con las aves de nuestros días aún se afiance más.