Tipos de suculentas y crasas

Entre las plantas utilizadas como ornamentales, uno de los grupos más populares son las llamadas suculentas. Esto por su gran variedad, belleza, resistencia y facilidad de adaptarse a distintas condiciones.

Las plantas crasas o suculentas generalmente son de lento crecimiento y se pueden tener en espacios pequeños. Es común apreciar jardines en miniatura con este tipo de plantas y son ideales para obsequiar en distintas celebraciones como bodas, comuniones o cumpleaños.

Además, los apasionados de la jardinería las aprecian porque hay un gran número de especies y variedades que las hacen muy coleccionables. Dentro del grupo de las suculentas encontrarás diversos tipos como aquellas que tienen espinas o las que no presentan un tallo evidente.

¿Qué es una planta suculenta o crasa?

Muchas veces se habla de plantas crasas y suculentas como de dos grupos distintos, pero los términos se pueden utilizar como sinónimo. La palabra crasa se origina a partir del latín crassus que significa gordo o grueso, haciendo referencia a que suelen tener los tallos u hojas engrosados.

Estas plantas se caracterizan por tener un tejido interno que almacena agua, conocido como parénquima acuífero. Además, las células que componen el tejido producen mucílago, una sustancia que contribuye a retener el agua dentro de la planta y le da una textura gelatinosa.

Las suculentas o crasas están adaptadas a vivir en ambientes muy secos como los desiertos y han desarrollado otras características para reducir las pérdidas de agua. Algunas, como los cactus, han transformado sus hojas y el tallo hace la función de fotosíntesis y de reserva de agua.

Otras presentan un mecanismo particular que les permite hacer parte de la fotosíntesis durante la noche. La mayoría de estas plantas tienen raíces muy extendidas y superficiales, capaces de aprovechar la poca agua que reciben en sus ambientes naturales.

Tipos de plantas suculentas

Aunque todas las crasas tienen gran abundancia de parénquima acuífero, son muy variadas en su morfología y pertenecen a distintas familias de plantas. A continuación presentaremos los tipos más comunes y las más utilizadas desde el punto de vista ornamental.

Suculentas con espinas

Hay un grupo de suculentas que se presentan en ambientes muy secos, que se adaptaron a estas condiciones modificando sus hojas. Estas se transformaron en espinas, que pueden servir como una forma de autosombreamiento a la vez que las protegen contra posibles depredadores.

En este grupo, la fotosíntesis es realizada por el tallo que tiene color verde, debido a la presencia de cloroplastos en los tejidos internos. Asimismo, esta estructura es la encargada de almacenar el agua que utilizan en tiempos de escasez, existiendo básicamente dos familias con esta estrategia.

Cactáceas

Es una familia casi totalmente originaria del continente americano, aunque hoy están distribuidas por todo el mundo como ornamentales. Algunas son árboles que desarrollan hojas y otras crecen sobre otras plantas (epifitas) en zonas húmedas y no tienen espinas.

No obstante, la mayoría de las cactáceas tienen hojas transformadas en espinas y pueden tener diversas formas. Los cactus tienen tallos columnares, las tunas o nopales aplanados y hay otras de tallos redondeados o globosos.

Puedes reconocer una cactácea porque presenta un conjunto de espinas arregladas en una estructura acolchada llamada areola. Las espinas se suelen disponer en dos series, con las externas más grandes y también se presentan tricomas que parecen fibras de algodón.

La zona de las areolas corresponde a las yemas y por eso ahí se formarán las flores y posteriormente los frutos. En las cactáceas globosas, estas estructuras aparecen en el ápice en una estructura conocida como cefalio.

Euforbiáceas

Este es una familia que se encuentra distribuida en casi todo el mundo de forma natural, con diferentes formas de vida. Un grupo de estas plantas, particularmente del género Euphorbia, presentan tallos columnares suculentos y tienen las hojas transformadas en espinas.

Este biotipo se presenta principalmente en especies africanas y puedes diferenciarlas fácilmente de un cactus. Lo primero es que no presentan areolas y las espinas se arreglan en pares, además que es común observar el desarrollo de pequeñas hojas.

Igualmente, estas plantas producen látex que es una sustancia lechosa que sale del interior cuando realizas un corte. Por último, las flores son muy diferentes a la de un cactus, generalmente con colores verdes poco llamativos y son unisexuales.

Crasuláceas

Se encuentran entre las plantas favoritas de los amantes de las suculentas por su gran variedad de formas y color de sus flores. Muchos de los mini jardines y arreglos que se diseñan para obsequiar o en decoración se realizan con plantas de esta familia. Por ejemplo, los que podrás encontrar en mirandagreen.es, que te brinda la posibilidad de dar un obsequio muy original y ecológico en tus eventos.

Las crasuláceas se caracterizan por tener hojas suculentas que se arreglan en rosetas y pueden presentar los tallos muy cortos o con ramas que se alargan. Tiene más de 1000 especies y los géneros más populares como ornamentales son SedumKalanchoe y Echeveria.

Este último es uno de los más demandados porque sus hojas suelen presentar distintas tonalidades y variegaciones que las hacen muy decorativas. Por otra parte, suelen ser de pequeño tamaño y son ideales para hacer mini jardines y otro tipo de composiciones en miniatura.

Hay más de 140 especies de Echeveria, la mayoría originarias de México y otras zonas de América, que se caracterizan por presentar, en su mayoría el ápice de la hoja con un pequeño mucrón. Además, las flores se forman a partir de un eje en el centro de la roseta, tienen forma de farolito y colores muy variados desde amarillos, naranjas, verdes o rojos.

Otras suculentas

Hay otro gran número de plantas que almacenan agua en sus tejidos, particularmente las hojas, que pertenecen a distintas familias. Entre estas destacan las Apocynaceae, Asparagaceae y  Xanthorrhoeaceae.

Dentro de las Apocynaceae hay géneros que se utilizan mucho como ornamentales, tales como HuerniaOrbea Stapelia. Todas son originarias principalmente de zonas secas de África, no tienen hojas y tienen tallos suculentos.

Lo más llamativo de estas plantas, que es lo que atrae principalmente a los cultivadores, son sus flores de colores oscuros y forma estrellada. Estas flores suelen olor muy mal, como a carne en descomposición, ya que son polinizadas por moscas.

Dentro de las Asparagaceae está la subfamilia Agavoideae donde hay un gran número de suculentas utilizadas en el diseño de jardines. Entre estas destaca el género Agave, con gran diversidad de especies de hojas arrosetadas y una larga duración.

También pertenece a este grupo el género Yucca con muchas especies arborescentes, ideales para jardines de tipo desértico. Igualmente, están Sanseviera y Dracaena que son muy apreciadas por la belleza y color de sus hojas así como la fácil propagación de sus especies.

Por último, dentro de las Xanthorrhoeaceae se encuentra uno de los grupos de suculentas más conocidos en todo el mundo, el género Aloe. Las hojas de este grupo se arreglan en rosetas, almacenan agua y suelen tener pequeñas espinas en los márgenes.

Hasta ahora se han descrito más de 500 especies de Aloe, casi todas originarias de África y el Cercano Oriente. La más conocida y utilizada es Aloe vera, cuyo mucilago es muy apreciado en cosmética y para uso medicinal.

Hay muchas otras especies de Aloe que son usadas como ornamentales por la belleza de sus hojas, ya que muchas son variegadas o de pequeño tamaño como Aloe aristata. Esta última especie se suele incluir en las composiciones de mini jardines que se hacen para obsequiar.

Como puedes apreciar, el mundo de las suculentas o crasas es muy amplio y pueden ser utilizadas de distintas formas por cultivadores y diseñadores de jardines. Además, son plantas fáciles de mantener, muy resistentes y que se adaptan a gran diversidad de condiciones siempre que cuenten con una buena disponibilidad de luz.